Políticamente incorrecto

viernes, 8 de junio de 2012

"Somos" hipócritas


Hoy estoy mucho más tranquilo. Y es que sé que a partir de hoy, 8 de Junio, todos empezaremos a cambiar nuestra actitud para mejorar el mundo y las relaciones humanas. Veo cantidad de famosos, personalidades, amigos, compañeros que hoy le han dado la vuelta a una prenda de vestir o a su avatar en una red social para mostrar su disposición a cambiar el mundo a través de la campaña "Somos". No sé como no me había dado cuenta antes de que hubiera tanta gente dispuesta a cambiar el mundo. Será que no notaba sus efectos. El mundo es un ente abstracto maligno que nos ataca a todos. Es algo externo a nosotros y a nuestras posibilidades. El mundo no lo hemos hecho nosotros a nuestra imagen y semejanza.Es una imposición involuntaria.

Vale bien, pero habrá que cambiarlo en cualquier caso, ¿no? Pues sí. Pero seamos sinceros, a partir de hoy, ¿Quién va a hacer algo más que darle la vuelta a una foto o a una prenda de vestir? A mí estas campañas de autocomplacencia me irritan de una manera que algunos creerán ilógica. Pero es que no soporto la hipocresía humana extendida. Nunca he pensado que un apagón de luz momentáneo sirviera para concienciar a la gente de la importancia del ahorro energético o de la contaminación.  Después de ese apagón, ¿realmente alguien ha disminuido su consumo energético diario sin que la razón sea ahorrarse un dinero? En realidad es más una forma de dar el pego, una foto por el compromiso, tranquilizo mi conciencia y a otra cosa mariposa. Como esa foto del futbolista con un niño africano en brazos, enternecedora. Pero sólo eso, enternecedora.

Vivimos en una sociedad que quiere cambiar el mundo empezando por el mundo en vez de empezar por su casa, sus amigos o las pequeñas cosas. Porque el mundo no es más que la unión de infinitos mini- mundos en los que pululamos nosotros. Un mini-mundo en el que todos quieren ser más que su vecino. Un mini-mundo en el que la envidia es el origen de todos los males y en el que nadie está dipuesto a sacrificar nada por el otro ni a quedar por debajo.

El mundo no está mal porque sí. Está mal porque yo puedo tener unas zapatillas de Nike o un chándal de Adidas mientras al trabajador que las fabrica en un país subdesarrollado le pagan una mierda o explotan a niños para ello. El mundo está mal porque nuestros gobernantes, que tampoco son impuestos sino elegidos por los integrantes de los pequeños mini-mundos que forman el gran-mundo que queremos cambiar, coquetean con países dirigidos por dictadores que explotan y dejan morir de hambre a sus habitantes. Porque para poder disponer de nuestro suministro de fosfato o de pesca en el Sahara, aceptamos arrodillarnos ante el dictador de Marruecos y permitir que éste siga masacrando a un pueblo privado de libertad desde hace más de 30 años.

No nos engañemos, somos todos responsables de que el mundo esté como está. Que una pequeñísima parte del mundo se aproveche de los recursos de todo el planeta es responsabilidad de todos los que nos aprovechamos. De las zapatillas nike y el Iphone 4S – the most amazing Iphone yet. Pero eso sí, yo le doy la vuelta a algo y asunto terminado. Ya estoy perdonado. Y si la iniciativa es seguida por toda la sociedad, ¡genial, la sociedad es estupenda y solidaria!

Ya que sabemos como funciona el mundo, por lo menos no seamos hipócritas. Que conste que no tengo nada en contra de las ONGs que han convocado esta campaña. Al contrario, si alguien puede decir que colabora para cambiar el mundo de verdad, son estas ONGs. Lo que critico es ese sentimiento de buenismo falso y autocomplacencia generalizado por toda la sociedad. Ojalá mañana, con la camisa del derecho, empecemos a trabajar por un mundo mejor desde nuestro entorno.

lunes, 4 de junio de 2012

Demagogia boomerang


Estamos acostumbrados últimamente a escuchar en boca de representantes de todos los partidos políticos que algunas propuestas de UPyD son demagogas o populistas. Se me ha ocurrido ir a Wikipedia y extraer la definición:

Demagogia (del griego δῆμος -dēmos-, pueblo y ἄγειν -agein-, dirigir) es una estrategia utilizada para conseguir poder político. Consiste en apelar a prejuicios, emociones, miedos y esperanzas del público para ganar apoyo popular, frecuentemente mediante el uso de la retórica y la propaganda.

Ya en la definición me resulta imposibe situar a UPyD, No hay partido político en España más alejado de prejuicios y emociones que UPyD. En su seno conviven personas de diferente procedencia ideológica e incluso procedentes del desapego o la abstención que se unen en torno a ideas y argumentos.

He encontrado también las siguientes formas de demagogia:

Falacias:
Argumentos que equivocan las relaciones lógicas entre elementos, o bien adoptan premisas evidentemente inaceptables. 

Manipulación del significado:
Las palabras, además de un sentido denotativo, tienen un sentido connotativo implícito, aportado por el contexto y conocimientos compartidos de los interlocutores, que añade ideas y opiniones, muchas veces de forma menos consciente que en su sentido denotativo. En la elección de las palabras, un discurso denotativamente neutro, puede connotar significados adicionales, dependientes de su contexto y su relación con la opinión de la audiencia, o los oyentes del discurso. De esta manera, los contenidos implicados son difíciles de refutar.


Omisiones:
Se presenta información incompleta, excluyendo posibles problemas, objeciones, dificultades, lo que resulta en la presentación de una realidad falseada, sin incurrir directamente en la mentira.

UPyD no tiene pelos en la lengua para hablar de sus propuestas por populares o impopulares que sean. Todo lo que está llevando a cabo en el congreso de los diputados estaba en su programa electoral.
PSOE omitió durante el tiempo que fue posible hacerlo, la realidad de la crisis así como el dato real del déficit, que más adelante conocimos.
PP omitió su programa electoral y lo pocó que no omitió lo ha incumplido después.

Re-definición del lenguaje:
Mediante la eliminación progresiva o eliminación de las palabras que menoscaban su posición, intentar modificar o hacer desaparecer la forma de pensar que se opone a sus argumentos.


Esto antes lo hacían sólo los nacionalistas. Ahora PP y PSOE están siguiendo sus pasos con una capacidad de aprendizaje que muchos quisiéramos para otros asuntos de la política española. Llamar, por ejemplo, “conflicto político” al asesinato de ciudadanos libres por parte de un terrorista.  En estos tiempos de “buenismo”  que UPyD llame a las cosas por su nombre no es muy “popular” que digamos.

Tácticas de despiste:
Consiste en desviar la discusión desde un punto delicado para el demagogo hacia algún tema que domine o donde presente alguna ventaja con respecto a su oponente o contrincante. No se responde directamente a las preguntas ni a los desafíos.

Buenos ejemplos de tácticas de despiste son el de Esperanza Aguirre de hablar de las pitadas del himno (que por cierto, me parecen infantiles e hipócritas) o la del PSOE de sacar el tema del pago del IBI por parte de la iglesia después de no mencionarlo durante los 8 años de su gobierno.

Estadísticas fuera de contexto:
Consiste en utilizar datos numéricos para apoyar una hipótesis o afirmación, pero que estando fuera de contexto no reflejan la realidad. Aquí también se cuenta el uso tendencioso de estadísticas, también conocido como demagogia numérica.

Demonización:
Esta aproximación consiste en asociar una idea o grupo de personas con valores negativos, hasta que esa idea o grupo de personas sean vistos negativamente.

Que vamos a decir de la enterna confrontación entre PP y PSOE, la derecha y la izquierda. Todo aquello calificado como “derecha” es demoníaco y pre-constitucional y todo aquello calificado como “izquierda” es bueno y progresista. Y eso de que la derecha  es la que trae el empleo y la izquierda la única que lo destruye.
En UPyD, lejos de confrontar, conviven dentro del partido gentes que provienen de la socialdemocracia y del liberalismo, pero con una idea de unidad y de llevar a cabo unas reformas que creen están por encima de las ideologías.

Falso dilema:
También conocida como falsa dicotomía, hace referencia a una situación donde dos puntos de vista alternativos son presentados como las únicas opciones posibles. Como ejemplo tenemos el típico: "Estás conmigo o estás contra mí". Supone una definición simplista de la realidad y de esa forma se consigue evitar la toma en consideración de las demás posibilidades.

Esta última definición parece sacada de un mitin de PP o PSOE, en los que el uno critica al otro, pero dejando bien claro que sólo hay 2 opciones posibles. Hay que decir que aquí el duopolio PPSOE no está solo, le acompañan la mayoría de medios de comunicación
En los mitines de UPyD, se apela al voto crítico, al libre albedrío, a no dejarse condicionar por una ley electoral hecha para consolidar el falso dilema.

Entonces, diputados de PP y de PSOE, ¿Quién es demagogo realmente?. Cuando utilizan esa palabra sin argumentos contra UPyD, se dan cuenta que quienes cumplen los requisitos para hacerse acreedores del título son ellos mismos?
Resulta que cumplir el programa electoral que tus votantes han considerado acertado es demagogia. Entonces omitir parte del mismo o incumplirlo, ¿qué es? Hacer política a la española, parece ser.

Sin embargo, la ultilización de esta palabra sin argumentos sólidos puede ser un arma de doble filo, como quien lanza un boomerang y le rebota en la cara. La acusación sistemática de demagogia a cualquier propuesta de UPyD demuestra que no tienen argumentos sólidos para oponerse a ella. Lo que no saben estos partidos es que cuando tildan de “demagoga” una propuesta que no apoyan se están retratando (o quizá lo sepan pero están dispuestos a pagar el precio con tal de cargar contra UPyD), ya que están reconociendo que esa propuesta es la que los ciudadanos quieren oir, y por tanto la propuesta que los ciudadanos demandan (La demagogia es frecuentemente asociada con el favorecimiento y la estimulación de las ambiciones y sentimientos de la población). Y ellos votan en contra. Demagogia boomerang.