Navarra dispone de una gran riqueza turístico-cultural que debemos ofrecer al resto del mundo.
Barcina animó al sector turístico a recorrer la senda de expansión y crecimiento que está logrando este sector, pese a la situación económica. Valoró el gran esfuerzo que el sector privado está realizando y le ha expresado su apoyo para relanzar Navarra como destino turístico de primer orden.
Señora Barcina, no bastan palmaditas o ánimos para el sector turístico. A su cargo se le requiere responsabilidad política. Hacer política de verdad, propuestas, debates y leyes. Los ciudadanos y empresarios del sector turístico (y de cualquier sector) necesitan acciones políticas encaminadas a facilitar su tarea y no mensajes esperanzadores. Y no me refiero a la última medida del Gobierno de Navarra: Subvenciones del 50% de las inversiones y costes de la seguridad social para jóvenes emprendedores de menos de 30 años. Esto no es una medida que solucione el problema global, es un pequeño parche.
Recojo a continuación el sentir de un emprendedor que escribe sobre la noticia en Diario de Navarra:
Emprendedor dice: “Soy emprendedor y no me parece bien que un emprendedor reciba subvenciones. Hacen falta medidas más complejas. Dar subvenciones de dinero público es lo más fácil. Solo sirven para un buen titular de prensa, subvención que luego no se materializa por los requisitos que se exigen. Las subvenciones no nos van a sacar de esta situación. Señores, asesórense correctamente y desmonte el tinglado publico que hay montado alrededor de la emprendeduría y que no sirve para nada. Cualquiera que se juegue su dinero en su idea de negocio entiende lo que digo”
El Gobierno de Navarra, debería escuchar a personas como este señor y atender a sus preocupaciones. Meter mano al problema de fondo y dejarse de medidas insuficientes que dan buenos titulares.
Ya de por sí, es prácticamente imposible crear una empresa o establecimiento con la cantidad de normas económicas, permisos y trámites existentes. Por tanto, en una situación de crisis económica los inconvenientes se multiplican.
Un aspecto positivo en Navarra, es que existe ya la ventanilla única digital, que permite realizar los trámites reduciendo sustancialmente las cargas administrativas que soportan y el tiempo de constitución. Aspecto que UPyD lleva en su programa electoral y que no en todas las comunidades existe aún. Por tanto sigamos en este camino y empecemos por eliminar los numerosos obstáculos y trámites injustificados para la creación de empresas. Empecemos por revisar nuestra normativa económica, y por eliminar aquellas normas innecesarias o duplicadas por otro ente administrativo.
Desde UPyD proponemos también lo siguiente, y así consta en nuestro programa electoral:
- Garantizar la independencia de los órganos supervisores y reguladores de los mercados
- Diseñar una política industrial que no seleccione los sectores de futuro que han de cambiar el modelo productivo, sino que proporcione las condiciones favorables para que los empresarios puedan hacerlo.
No se trata sólo de fomentar el emprendimiento. Esto no servirá de nada si a la vez se mantiene un entramado legislativo que echa para atrás a cualquier persona que decida emprender. Y esto, a diferencia de la subvención del Gobierno de Navarra, servirá para todos, para los que tengan menos de 30 años y para los que tengan más de 30, que, no nos engañemos, son la mayoría de los empresarios. No pongamos más trabas a la creación de empleo que las ya existentes debido a la precariedad de la actual situación económica. En cualquier momento, pero ahora más que nunca, se requiere una profunda reforma laboral y un adelgazamiento de las numerosas normas económicas en Navarra, así como un mejor ajuste y coordinación con las normas del estado para evitar duplicidades y hacer la norma eficaz.